Los Géminis son personas con alto nivel de armonía, son bastante temperamentales, y muy nerviosas.
También son muy humanos, atentos, detallistas y cariñosos, pero ojo, si tú no lo eres con ellos, ya puedes olvidarte porque pasarán de ti a la velocidad de la luz.
Los Géminis son leales, aunque bastante interesados, y si ven que no van a obtener ningún tipo de beneficio, pierden el interés total. Son muy cerebrales, enigmáticos, llegan a cautivarte con la mirada, pero son orgullosos hasta decir basta.
Consideran que la vida es como un juego y buscan la diversión y provocar nuevas situaciones que les motiven.
Los Géminis son personas con ideas muy cambiantes, un día se levantan con una idea, y al día siguiente piensan justo lo contrario. Seguro que alguna vez has tratado con un Géminis con el que te llevas estupendamente y al día siguiente ni te saluda, y al siguiente vuelve a ser tu amigo del alma; no están locos, es que son así, es una de sus características más marcadas, aunque si no se lo tienes muy en cuenta, puedes tener a un Géminis en tu agenda de por vida.
Los géminis son muy divertidos, elocuentes y amables, pero cuidado, porque a veces son un poco mentirosos y bastante superficiales. Tienen las dos caras de una moneda, y eso a veces provoca incertidumbre en la gente que les rodea; su carácter es doble, bastante complejo y contradictorio.
Se desaniman con facilidad cuando no consiguen lo que quieren, y les gusta recibir atención, regalos y halagos.
Como amigos, los Géminis son bastante posesivos, les gusta ser el centro de atención de todas las reuniones y si no tienen su momento de gloria, pueden llegar a cabrearse o incluso marcharse sin despedirse directamente.
En el plano romántico, suelen ser bastante independientes y calculadores, ven las relaciones como si pactasen un negocio, por lo que si no ven beneficio personal en una relación, desisten a la velocidad del rayo.
A veces utilizan sus atributos para conseguir sus propios objetivos y son capaces de recurrir a la mentira sin perder su encanto con tal de obtener lo que quieren.
Los géminis son muy exigentes consigo mismos, y en el trabajo se emplean al máximo para ser los mejores; son astutos e inteligentes, y no tienen sangre fría a la hora de tomar decisiones. Son egocéntricos, por lo que si dirigen un equipo de personas, harán reuniones frecuentemente para sentirse el centro de atención y que todos le escuchen.
Tienen gran capacidad de análisis y son muy responsables a la hora de desarrollar proyectos importantes y de gran responsabilidad.
Si no le salen las cosas como desean, se desmotivan con mucha facilidad, y llegan incluso a frustrarse y desanimarse, por lo que si trabajas con un Géminis, te tocará ser el hombro en el que se eche a llorar cada vez que se sienta desanimado a nivel laboral.